Movimiento Ciudadano de Cartagena (MC), ha constatado que actualmente hay hundimientos, agujeros y desperfectos en el suelo de madera que circunda el Auditorio y Palacio de Congresos El Batel, redundando en su fragilidad, como ya anunció que ocurriría en el informe pericial sobre la seguridad en este recinto, que la formación política encargó a un gabinete de gestión en edificaciones para tratar de garantizar el bienestar de los cartageneros y que presentó ante los medios de comunicación en diciembre de 2013.
Pues bien, ahora los agujeros que salpican el pavimento de madera, sobre todo en la parte del edificio más cercana a la Pescadería de Santa Lucía, son un hecho. Así pues, los transeúntes tendrán que llevar cuidado a la hora de acceder al perímetro del Auditorio, ya que las zonas dañadas no están ni siquiera señalizadas, motivo por el cual MC pedirá en el próximo Pleno municipal la inmediata subsanación de estas deficiencias que podrían acarrear lesiones a los ciudadanos.
Para José López, edil de MC, “no se trata de un capricho o una obsesión para nuestra formación política tratar los despropósitos del Auditorio, sino que pese a quien le pese, aparece aquí una chapuza detrás de otra que nos vemos obligados a denunciar públicamente por el bien de los cartageneros, como ésta del pavimento de madera hundido y con agujeros, que esperemos no cueste algún disgusto mayor, con la lesión de algún ciudadano”.
Y añade que “tras valorar el estado de seguridad que ofrece este edificio que abrió sus puertas en 2011 después de siete años de retraso y que ha triplicado su coste pasando de los 20 millones presupuestados en inicio a los 64 que ha costado, no estaría mal que al menos tuviera un suelo firme”.
PELIGROSO PARA CAMIONES CISTERNA
Igualmente, MC quiere remitir al informe antes mencionado para señalar la peligrosidad que entraña el suelo del Auditorio a la hora de resistir el paso de vehículos sobre él, donde se decía textualmente que este suelo resulta “inapropiado e intransitable para vehículos pesados”, ya que “está compuesto de tablas fijadas al pavimento en unos pocos puntos, lo que lo impediría el paso de un camión cisterna de bomberos porque se hundiría, incluso de un automóvil”.