La declaración en concurso de acreedores de Puerta Nueva pone en evidencia que el gobierno de Pilar Barreiro ha llevado a Cartagena a perder los más de dos millones de euros que esta sociedad adeuda a Casco Antiguo.
Ahora, desde Movimiento Ciudadano (MC) podríamos pedir explicaciones a Barreiro de el porqué concedió a la empresa representada por su amigo José Antonio Alonso el concurso, cuando los técnicos y la lógica señalaban a Ferrovial como acreedora de dicha adjudicación, empresa que antes, durante y después del concurso es más solvente que la que nos trajo el imputado ex alcalde. Pero no lo haremos, porque esa explicación es evidente y sobre ella se ha escrito mucho.
Lo que desde MC si exigimos por medio de este comunicado es la dimisión inmediata de la alcaldesa Pilar Barreiro, de los ediles Francisco Espejo y Joaquín Segado, así como la del gerente de Casco Antiguo, Luís Miguel Andrés, la del vicealcalde, José Cabezos, y la del director de la Asesoría Jurídica, Francisco Pagán Martín Portugues, y cualesquiera otros personajes del entramado municipal que sean responsables de la actuación y las omisiones que nos han llevado a perder, que se sepa, esos más de dos millones.
Según el edil de MC, José López, “lo exigimos porque estos personajes se han negado sistemáticamente a reclamar la deuda judicialmente desde la sentencia de septiembre de 2013, lo cual pedimos en innumerables ocasiones, y sólo lo han hecho después de que José Antonio Alonso fuera detenido e imputado como cabecilla de una red de tráfico de influencias, donde, al parecer, colaboraba con algunos de los empresarios que ha traído a Cartagena a hacer otros negocios tan lucrativos como el que nos ocupa”.
Y continua “es más, lo han hecho después de que la sociedad preparara el concurso, o lo que es lo mismo, a remolque de ésta. Y sin exigir las responsabilidades penales que el propio Letrado contratado al efecto por el consistorio puso de manifiesto por la descapitalización de Puerta Nueva”.
López finaliza diciendo que “queda una esperanza para la ciudad, ese dinero se puede recuperar, querellándose contra las personas que descapitalizaron la empresa, quizás también contra los responsables municipales que han permitido a esta sociedad reírse de Cartagena y llevarse varios millones de euros sin pagar a Casco Antiguo, y exigiendo que el concurso sea declarado culpable, pero esta esperanza pasa, desde luego, por la marcha de todos los aquí referidos que, más que negligentes, son los responsables directos de que se pierdan más de dos millones de euros, y quien sabe de cuantos más desmanes”.