El próximo jueves, nuestra formación volverá a llevar al pleno municipal la delicada situación que viven nuestros vecinos en sus barrios y diputaciones, que afecta a cuestiones básicas que deberían estar garantizadas y, sin embargo, constituyen un auténtico ‘lujo’ para algunos cartageneros.
La situación ha sido descrita por el concejal cartagenerista, Enrique Pérez. “San Félix y la Urbanización Mediterráneo son dos de los grandes olvidados del Gobierno. Ambos son víctimas de una gestión que se queda en la foto y las declaraciones vacías pero que no llega a nuestras calles ni a los vecinos. La estabilidad se queda en sus despachos porque Cartagena es un municipio convulsionado y en constante decadencia”.
Barrios inhóspitos y condenados por el Gobierno
Posteriormente, Pérez ha enumerado algunas de las vicisitudes que los vecinos de estas barriadas deben sortear a diario. “San Félix es un barrio inaccesible para muchos de sus habitantes. No se actúe en un plan riguroso de rebajes, haciendo especialmente complicado el tránsito para personas con movilidad reducida. Además, los vecinos se quejan del abandono que sufre el arbolado y la carencia de sombras que ello provoca. Las plazas están en un lamentable estado y hay carencia de iluminación con farolas estropeadas que no se sustituyen”.
“Similar situación hemos encontrado en la Urbanización Mediterráneo”, ha subrayado el edil. “Jardines desatendidos, espacios públicos decantes con elementos que, por su estado, son una amenaza para la salud de los usuarios, deficiencias en el acerado y asfaltado y problemas generales de salubridad”.
“Para San Félix y la Urbanización Mediterráneo exigimos la sensibilidad y el compromiso del Gobierno local con actuaciones dotadas de financiación y plazos de ejecución. Si para ellas no es una prioridad se debe a que ni Castejón ni Arroyo pisan la calle, o solo a esos sitios donde reciben aplausos subvencionados”, ha indicado Enrique Pérez.
Otras exigencias
Más tarde, el concejal de MC ha añadido que durante la sesión plenaria su formación propondrá “un plan especial de protección para la zona arqueológica de Las Amoladeras; obras de conservación para el molino de ‘Lo Pollo’ en Pozo Estrecho, así como apoyar la reivindicación de los agricultores del Campo de Cartagena para requerir al Consejo Regulador de la Consejería de Agricultura celeridad en su gestión administrativa para la obtención del sello de calidad para la patata cartagenera”.
“Continuaremos reclamando atención para las zonas más desprotegidas de nuestro municipio. Los vecinos seguirán encontrando en nosotros un altavoz para recordar al Gobierno que hasta la fecha sólo han cumplido con ellas mismas y su estabilidad laboral”, ha concluido el edil cartagenerista.